Según la Wikipedia, la vichyssoise es una sopa internacionalmente conocida que, a la vez, es una variante de una receta tradicional de la cocina francesa. Esta sopa es una crema fría salada elaborada con puerro, cebolla, patata, leche y nata. Se sirve muy fría en un plato hondo, cuenco o taza.
La nacionalidad culinaria de la vichyssoise se discute desde hace casi un siglo, para determinar si esta innovación gastronómica es francesa o americana. El crédito del descubrimiento del plato se atribuye a Louis Diat, un cocinero francés del Ritz-Carlton de Nova York, durante la Primera Guerra Mundial.
El mismo artículo explica que la sopa fue denominada en sus comienzos crème vichyssoise glacée. Para dar a la sopa un nombre conocido, Diat escogió el de la ciudad de Vichy, que se encuentra no muy lejos de su pueblo natal, Montmarault. Otros chefs franceses se asignan el crédito de su invención, como el chef Jules Gouffe que dice haber sido el primero al cocinarla, publicando su receta en el Royal Cookery (1869). Sea como sea, estamos ante una elaboración de aquellas que te provocan el mismo sentimiento que un buen gazpacho fresquito en verano. La podéis hacer más o menos líquida, según os guste. Como ya hemos comentado, normalmente esta sopa se sirve bien fría, pero también se puede servir tibia o caliente. Recordad que previamente tendremos que hacer el caldo de gallina o pollo.
3 puerros grandes
2 patatas medias
1 cebolla
200 ml leche
200 ml nata líquida o crema de leche
cebollino
1,5 l de caldo de pollo o gallina
mantequilla
aceite de oliva
sal
Variantes:
Podéis hacerla más o menos líquida según la cantidad de leche y/o caldo que ponéis
Podéis sustituir la cebolla por cebolla tierna
Se puede servir con dados de pan fritos
Preparamos todos los ingredientes.
Retiramos también las raíces.
Abrimos el puerro por la mitad longitudinalmente...
y los lavamos bien debajo del grifo.
Ya sabéis que los puerros pueden contener arena y es importante limpiarlos bien.
A continuación lo cortamos en rodajas. No importa mucho la medida.
Picamos la cebolla también.
Pelamos las patatas y las rompemos.
Al romperlas ayudaremos a que la patata suelte el almidón que lleva, un espesante natural.
Paralelamente, iremos calentando el caldo de pollo o gallina.
Ahora, en una cazuela pondremos unos dados de mantequilla.
Dejaremos que se deshagan y añadiremos un poco de aceite de oliva también.
En esta mezcla freiremos un poco la cebolla.
Y seguidamente, los puerros.
Removedlo bien, que todo se impregne de grasa.
Removemos.
Un poco de sal...
y un poco de pimienta negra también.
Hay quien deja que la verdura coja un poco de color.
A continuación vertemos el caldo de pollo.
Lo dejaremos cocer.
Mejor si lo tapáis. Tiene que estar unos 16-18 minutos.
Vaya, hasta que la patata esté cocida.
A continuación ya podéis parar el fuego y pasarlo por la batidora eléctrica.
Tiene que quedar bien fino.
Añadid la nata y la leche si queréis.
Y triturad un rato. Rectificad de sal y de textura añadiéndole más leche si hace falta. En este caso, he prescindido de los 200 ml de leche. Sólo he puesto 200 ml de nata líquida.
A mí, personalmente, me gusta más cremosa, más espesa.
Sólo nos quedará pasar la Vichysoisse por un colador.
Picaremos un poco de cebollino, bien pequeño.
Emplatamos y decoramos con el cebollino.
Y ya la podemos servir en la mesa.
Es recomendable hacer la Vichysoisse la noche anterior, y así al día siguiente está bien fresquita. ¡Buen provecho!