Si, si, calamar al humo. No me he equivocado. Ya sabéis que soy de cocina tradicional, pero de vez en cuando, me gusta incorporar nuevas técnicas y tendencias. Muchos ya lo conoceréis, pero existe el "humo en polvo". Como lo oís. Son unos polvos que aromatizan vuestro plato.
De entrada puede resultar un aroma fuerte o desagradable, pero bien utilizado le aportará a vuestro plato aquel sabor a brasa, de estar hecho a la parrilla... a la leña... y, creedme... el resultado es muy interesante. No hay que decir que podéis hacer el mismo plato sin utilizar el humo...que os quedará prácticamente igual de bueno. El jengibre tampoco hace falta que sea fresco (que si lo es, mejor), puede ser en polvo.
1 pimiento verde cortado en juliana fina
2 cebollas tiernas cortadas en juliana fina
2 zanahorias dulces cortadas en juliana fina
200gr. champiñones frescos cortados en láminas finas
1/2 jengibre fresco
1 cucharada de salsa por wok Sukiyaki
2 cucharadas de salsa de soja dulce
1 cucharada de maizena diluida en medio vaso de agua
0,5gr. humo en polvo
un poco de semillas de sésamo
aceite de oliva
sal
1 paquete de fideos chinos (noodles)
Preparamos toda la verdura.
Utilizaré jengibre fresco... que podéis comprar en cualquier tienda especializada.
Semillas de sésamo.
Las salsas: de soja dulce y sukiyaki, especial para woks.
Humo en polvo. Como hemos comentado antes, eso le aportará al calamar una sabor en parrilla... a barbacoa hecha con leña. Lo podéis comprar en tiendas especializadas.
Empezamos por cortar los pimientos en juliana bien fina.
Los champiñones también, en láminas finas.
Las zanahorias, si son dulces mejor.
También, a tiras finas.
La cebolla tierna...
... le sacamos la primera capa... y también, en tiras finas.
... lo reservamos.
Primero de todo, con el wok bien caliente (fuego al máximo) y un chorro de aceite de oliva, salteamos los champiñones.
Utilizaremos la salsa de soja.
Un chorro, más o menos... como dos cucharadas grandes. Pero según vuestro gusto.
Enseguida cogen color. Pensad que el champiñón se puede comer crudo, por lo tanto, no hay que hacerlo demasiado. Lo dejamos medio cocido y lo reservamos.
En el mismo wok (si hace falta poned un chorro más pequeño de aceite)... salteamos la verdura.
Que coja color. No se tiene que sofreír, se tiene que saltear... tiene que quedar un poco cruda también. La reservamos.
Yo he utilizado la mitad de este jengibre.
Tiramos el jengibre picado.
Y los calamares, bien limpios y salados. Y los dejamos hacer un rato... que se hagan bien.
Mientras se hacen los calamares, preparamos la salsita. En medio del agua... tenéis que disolver una cucharadita de harina de maíz (o almidón).
Aprovecharemos para añadir también la salsa de wok.
Una o dos cucharadas, más o menos.
Y aquí, también... incorporamos 1/3 de cucharadita de humo en polvo. Lo removemos todo y lo reservamos.
El calamar tiene que empezar a salpicar y engancharse... que es cuando queda mejor.
Incorporad una pizca de sésamo.
Ya podemos ir preparando los fideos chinos. Poned una olla con abundante agua a calentar. Hoy en día, estos fideos los podéis encontrar en cualquier gran superficie.
Estos son de huevo, concretamente.
Cuando hierva el agua, paramos el fuego... y dejamos escaldar los fideos durante 4 minutos de reloj.
Mientras, vamos acabando el wok.
Al calamar, le añadimos los champiñones...
... y la verdurita...
... y lo removemos bien... con una buena sacudida de muñeca.. jeje...
Seguidamente, incorporamos la salsita que hemos preparado. Le damos tres o cuatro vueltas... que absorba el líquido (que cuajará enseguida)....
... y ya tenemos el wok hecho. Lo reservamos en una bandeja para presentar en la mesa.
Una vez cocidos los fideos... los podéis saltear unos segundos en el mismo wok bien calentito.
Emplatamos primero los fideos.
Encima... bien caliente, también nuestro wok.
Y ya podemos empezar a comer.
¿A que tiene buena pinta?... pues estaba más que bueno, jeje. Un consejo: ¡no miréis estas fotos si no habéis comido!
¡Buen Provecho!